Canción rota, de Carmen Martín Gaite
Siempre que iba a cantar
algo se interponía
y a mí no me importaba,
¡había tanto tiempo!
Mi canción se quedaba en el alero,
confiada,
meciéndose en la espera
cuajada de horizontes.
Si alguna vez con mudo gesto
antiguo
acaricio las cuerdas,
el aire se retira
y el corazón me late nuevamente
con aquellos latidos turbulentos,
heraldos de mi canto.
¡Ay, mi canción truncada!
Yo nunca tenía prisa
y la dejaba siempre,
amor,
para después.
Carmen Martín Gaite (1925-2000). Fue una de las figuras más importantes de las letras hispánicas. Recibió premios de la talla del Nadal, el Nacional de Literatura, el Nacional de las Letras, o el Anagrama de Ensayo.