{"id":5302,"date":"2016-03-11T17:34:21","date_gmt":"2016-03-11T17:34:21","guid":{"rendered":"\/?p=5302"},"modified":"2016-03-18T13:53:04","modified_gmt":"2016-03-18T13:53:04","slug":"nicolas-dominguez-bedini-habla-de-un-poema-de-jose-agustin-goytisolo","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/nicolas-dominguez-bedini-habla-de-un-poema-de-jose-agustin-goytisolo\/","title":{"rendered":"Nicol\u00e1s Dom\u00ednguez Bedini habla de un poema de Jos\u00e9 Agust\u00edn Goytisolo"},"content":{"rendered":"

A veces<\/strong><\/em><\/p>\n

A veces<\/p>\n

alguien te sonr\u00ede t\u00edmidamente en un supermercado<\/p>\n

alguien te da un pa\u00f1uelo<\/p>\n

alguien te pregunta con pasi\u00f3n qu\u00e9 d\u00eda es hoy en la sala de espera del dentista<\/p>\n

alguien mira a tu amante o a tu hombre con envidia<\/p>\n

alguien oye tu nombre y se pone a llorar.<\/p>\n

 <\/p>\n

A veces<\/p>\n

encuentras en las p\u00e1ginas de un libro una vieja foto de la persona que amas y eso<\/p>\n

te da un tremendo escalofr\u00edo<\/p>\n

vuelas sobre el Atl\u00e1ntico a m\u00e1s de mil kil\u00f3metros por hora y piensas en sus ojos<\/p>\n

y en su pelo<\/p>\n

est\u00e1s en una celda mal iluminada y te acuerdas de un d\u00eda luminoso<\/p>\n

tocas un pie y te enervas como una quincea\u00f1era<\/p>\n

regalas un sombrero y empiezas a dar gritos.<\/p>\n

 <\/p>\n

A veces<\/p>\n

una muchacha canta y est\u00e1s triste y la quieres<\/p>\n

un ingeniero agr\u00f3nomo te saca de quicio<\/p>\n

una sirena te hace pensar en un bombero o en un equilibrista<\/p>\n

una mu\u00f1eca rusa te incita a levantarle las faldas a tu prima<\/p>\n

un viejo pantal\u00f3n te hace desear con furia y con dulzura a tu marido.<\/p>\n

 <\/p>\n

A veces<\/p>\n

explican por la radio una historia rid\u00edcula y recuerdas\u00a0 a un hombre que se llama<\/p>\n

Leopoldo<\/p>\n

disparan contra ti sin acertar y huyes pensando en tu mujer y en tu hija<\/p>\n

ordenan que hag\u00e1is esto o aquello y enseguida te enamoras de quien no hace ni<\/p>\n

caso<\/p>\n

hablan del tiempo y sue\u00f1as en una chica egipcia<\/p>\n

apagan lentamente las luces de la sala y ya buscas la mano de tu amigo.<\/p>\n

 <\/p>\n

A veces<\/p>\n

esperando en un bar a que ella vuelva escribes un poema en una servilleta de<\/p>\n

papel muy fino<\/p>\n

hablan en catal\u00e1n y quisieras de gozo o lo que sea morder a tu vecina<\/p>\n

subes una escalera y piensas que ser\u00eda bonito que el chico que te gusta te violara<\/p>\n

antes del cuarto piso<\/p>\n

repican las campanas y amas al campanero o al cura o a Dios si es que existiera<\/p>\n

miras a quien te mira y quisieras tener todo el poder preciso para mandar que en<\/p>\n

ese mismo instante se detuvieran todos los relojes del mundo.<\/p>\n

 <\/p>\n

A veces<\/p>\n

s\u00f3lo a veces gran amor.<\/p>\n


\nSobre A veces, solo a veces gran amor dice Nicol\u00e1s Dom\u00ednguez Bedini:<\/strong><\/em><\/p>\n

Me top\u00e9 con el poemario de Jos\u00e9 Agust\u00edn Goytisolo (1928-1999) A veces gran amor<\/em> (1981. Barcelona: Laia Literatura) revolviendo mesas de saldos en librer\u00edas sobre la Avenida Corrientes. Debe de haber sido a la hora del atardecer y durante alg\u00fan d\u00eda de la semana, porque si de algo estoy seguro es que viv\u00eda a\u00fan en la casa de mis padres, iba a los primeros a\u00f1os de colegio secundario por las ma\u00f1anas en San Miguel y que comenc\u00e9 a leer A veces gran amor<\/em>, al menos hasta la p\u00e1gina 30, sentando en la ya extinta -hace a\u00f1ares- pizzer\u00eda Seraf\u00edn<\/em>, a donde siempre acud\u00eda para coronar mi regreso a los suburbios, pidiendo el mismo men\u00fa: una tartaleta de frutilla con un (\u2026sub sub sub\u2026<\/em>) submarino.<\/p>\n

La mayor\u00eda de mis expediciones a la gran ciudad eran preferentemente para recorrer disquer\u00edas, e iba alternando -seg\u00fan mis ganas- las estaciones de tren del Ferrocarril San Mart\u00edn donde bajar\u00eda en cada ocasi\u00f3n. Por ejemplo, si bajaba en Devoto era para hacer el circuito de todas las disquer\u00edas empotradas en galer\u00edas sobre la Avenida Cabildo. Otras veces bajaba del tren en Palermo para avanzar a lo largo de Avenida Santa Fe en direcci\u00f3n al Obelisco pero mi destino final favorito siempre fue y ser\u00e1 Retiro, para desde all\u00ed tomar la gran ciudad subiendo a pie desde la Plaza San Mart\u00edn\u2026<\/p>\n

Lo que no variaba dependiendo si bajaba en Palermo o en Retiro era el tramo de Avenida Corrientes entre las calles Florida y Callao o viceversa, y en donde sol\u00eda entrar en librer\u00edas tambi\u00e9n, buscando cancioneros y biograf\u00edas de grupos de rock. As\u00ed que fue por esa zona donde revolviendo libros como si fuesen discos, hasta el \u00faltimo de la fila, con los dedos de las ma\u00f1o cubiertos de polvillo ruin di con mi ajetreado ejemplar de A veces gran amor<\/em> que dicho sea de paso, a\u00fan conservo con fruici\u00f3n.<\/p>\n

\u00a1Vaya recorrido misterioso que hacen algunos libros usados! Apasionante tema del que no viene al caso seguir extendi\u00e9ndome, as\u00ed que mejor volvamos de lleno hacia la mesa de Seraf\u00edn<\/em> donde el adolescente que fui est\u00e1 empezando a leer con curiosidad el poemario de Jos\u00e9 Agust\u00edn Goytisolo reci\u00e9n adquirido – \u00bfEn cu\u00e1l librer\u00eda del hondo pozo del pasado<\/em> habr\u00e1 sido? \u00bfEn Librer\u00edas Fausto<\/em>? \u00bfEn Librer\u00edas del Libertador<\/em>? \u00bfEn una peque\u00f1a librer\u00eda que dur\u00f3 un suspiro y cuyo nombre no retuve en mi memoria pero que recuerdo estaba situada dentro de la galer\u00eda donde estuvo la disquer\u00eda El Atril<\/em>?…- .<\/p>\n

Recuerdo estar leyendo por vez primera el arranque de A veces gran amor <\/em>con extra\u00f1eza y curiosidad dado que no estaba nada empapado en lectura de poemarios y tambi\u00e9n recuerdo cierta impaciencia a medida que iba avanzando con la lectura porque intu\u00eda que los poemas all\u00ed contenidos, de seguir enfrascado leyendo la introducci\u00f3n, no llegar\u00eda a leerlos nunca.<\/p>\n

Primero le\u00ed en la p\u00e1gina cinco una nota editorial donde el prologuista aclaraba \u201cel origen de un pr\u00f3logo exc\u00e9ntrico o, al menos, infrecuente\u201d. Luego le segu\u00edan unos fragmentos de varias p\u00e1ginas titulados Sobre el amor y otras nimiedades <\/em>que consist\u00edan en la transcripci\u00f3n de unas charlas que Jos\u00e9 Agust\u00edn Goytisolo dio en una universidad hasta que llegando al p\u00e1rrafo final y justo antecediendo \u00a0al poema \u00a0A veces<\/em> \u2013el poema que inspira el t\u00edtulo del poemario, el poema que eleg\u00ed para esta invitaci\u00f3n especial en la p\u00e1gina web del CCEBA, el poema del que no puedo ser nada objetivo porque es uno de mis poemas favoritos de todos los tiempos- aconteci\u00f3 el cimbronazo que perdura hasta hoy en mi y que con mucho gusto tambi\u00e9n pasar\u00e9 a transcribirles a continuaci\u00f3n, \u00a1muchas gracias! :<\/p>\n

al escuchar estos poemas quiero que pens\u00e9is que poeta no es el que siente o se conmueve eso no tiene importancia pero si la tiene saber que el poeta es el que hace sentir o conmoverse a los dem\u00e1s o sea que no es poeta el que quiere sino el que puede y en cuanto a los poemas quiero recordaros la frase que Mallarm\u00e9 le solt\u00f3 a Degas cuando el pintor le dijo que \u00e9l quer\u00eda ser tambi\u00e9n poeta pues cre\u00eda tener buenas ideas y buenos sentimientos pero que no lograba hacer un buen poema y entonces Mallarm\u00e9 le dijo aquello de ah mi buen amigo no es con buenas ideas y con sentimientos buenos o malos con lo que se hacen los poemas sino con palabras y ese saber hacer con palabras conmover a otros es el don del oficio y el artificio que el poeta ha de emplear en su obra<\/p>\n

o\u00edd pues este canto de arpista\u2026<\/p>\n

Nicol\u00e1s Dom\u00ednguez Bedini<\/strong> (Buenos Aires, 1973) es poeta, narrador y DJ. Public\u00f3 en las revistas Uni\u00f3n y Amistad, 8cho Y och8, Al o\u00eddo, Sede, La Guacha, Diario de Poes\u00eda y La novia de Tyson. Es autor del poemario Decirte al o\u00eddo <\/strong>(El Monte An\u00e1logo Ediciones, 2007) y de\u00a0Sue\u00f1o con lavadoras & otros poemas <\/strong>(Editorial Bajo La Luna, 2013). M\u00e9danos de oro<\/strong> se titula su primera novela que est\u00e1 pr\u00f3xima a ser publicada por Editorial Bajo La Luna.<\/em><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

A veces<\/p>\n","protected":false},"author":2,"featured_media":5305,"comment_status":"closed","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[286],"tags":[],"class_list":["post-5302","post","type-post","status-publish","format-standard","has-post-thumbnail","hentry","category-poetas-leen-poesia","h-entry"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/5302"}],"collection":[{"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/users\/2"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=5302"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/5302\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/media\/5305"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=5302"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=5302"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/v4.cceba.org.ar\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=5302"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}