Poetas leen poesía

Ignacio Di Tullio habla de un poema de Seamus Heaney

Cavar

Entre mis dedos índice y pulgar
cargo la pluma fuente, como un arma.
Entra por la ventana un ruido áspero
–la pala que se entierra en la gravilla–
y me asomo: mi padre está cavando.
Mientras agacha la agobiada espalda
junto a las flores, vuelvo veinte años,
y lo veo inclinarse entre los surcos
de papas, donde él solía cavar.
Con una bota rústica apoyada
en la pala, luego calzaba el mango
en la parte interior de la rodilla,
e iba tirando de los largos tallos
y después con la punta reluciente
de la pala, que hundía hondo en la tierra,
separaba las papas que sacábamos.
Nos gustaba tenerlas en las manos
y sentir su dureza refrescante.
Por Dios, sí que sabía manejar
una pala, mi padre, igual que el suyo.
Mi abuelo era capaz de recoger
en un día más turba que cualquiera.
Una vez le llevé un poco de leche
dentro de una botella con su tapa
precaria de papel. Él se paró
para beber. Después volvió a agacharse
y se puso a cortar con gran esmero:
arrojaba terrones por encima
del hombro, sin cesar, mientras cavaba
y cavaba, buscando turba buena.
El frío olor del moho de las papas,
el chapoteo en la turba empapada,
el filo de la pala cercenando
las raíces, me vuelven a la mente;
y sin embargo, yo no tengo pala
para seguir a hombres como ellos.
Entre mis dedos índice y pulgar
cargo la pluma fuente.
Voy a cavar con ella.
Versión de Ezequiel Zaidenwerg.

 

Digging

Between my finger and my thumb
The squat pen rests; snug as a gun.

Under my window, a clean rasping sound
When the spade sinks into gravelly ground:
My father, digging. I look down

Till his straining rump among the flowerbeds
Bends low, comes up twenty years away
Stooping in rhythm through potato drills
Where he was digging.

The coarse boot nestled on the lug, the shaft
Against the inside knee was levered firmly.
He rooted out tall tops, buried the bright edge deep
To scatter new potatoes that we picked,
Loving their cool hardness in our hands.

By God, the old man could handle a spade.
Just like his old man.

My grandfather cut more turf in a day
Than any other man on Toner’s bog.
Once I carried him milk in a bottle
Corked sloppily with paper. He straightened up
To drink it, then fell to right away
Nicking and slicing neatly, heaving sods
Over his shoulder, going down and down
For the good turf. Digging.

The cold smell of potato mould, the squelch and slap
Of soggy peat, the curt cuts of an edge
Through living roots awaken in my head.
But I’ve no spade to follow men like them.

Between my finger and my thumb
The squat pen rests.
I’ll dig with it.

 

Sobre Digging dice Ignacio Di Tullio:

Digging, del libro Muerte de un naturalista, es el poema de Seamus Heaney  al que más veces volví.  Me gusta pensar a Heaney como un poeta “de la tierra”. Se apoya en un lenguaje crudo e incisivo para caer con todo el peso de las imágenes. Tiene un gran manejo del ritmo y la musicalidad, lo que lo vuelve muy difícil de traducir.

Un hombre que sostiene una pluma mira por la ventana y ve a su padre trabajando. La película rebobina hasta la canción de las palas hundiéndose en el barro en busca de “la buena turba”. Hay una singular variación a uno de los temas que definen a la sociedad irlandesa: la tradición.  Es un poema sobre la densidad de la sangre, sobre el dilema de aquel que siente el llamado de las raíces pero que “no tiene pala para seguir a hombres como esos”. El final es simple y demoledor: Queda flotando la voz de la honradez como único mandato.

 

Ignacio Di Tullio. Buenos Aires, 1982. Poeta y traductor. Publicó Abrazo a la distancia – poesía- (2006) y los ensayos breves de La música sin nombre (Trópico Sur Ediciones, 2013). Es  profesor universitario y coordina talleres de escritura creativa. 

 

 

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